Carlos Alberto Montaner afirma que para entender al hombre y su pasado es necesario establecer el origen de sus alimentos, puesto que ello ha permitido la sobrevivencia y el desarrollo humano. América cuenta con una interesante historia gastronómica que se inicia con los viajes de Cristóbal Colón, quien buscando rutas más cortas hacia la India para adquirir especias que eran necesarias en las comidas de los europeos, descubrió del nuevo continente. Esta situación de causalidad trajo nuevos alimentos que vinieron a cambiar las costumbres de los pueblos americanos. Asimismo, productos originarios de las tierras americanas fueron adoptados en los hábitos alimenticios de las culturas europeas, ya enriquecidas por el contacto con griegos, fenicios, cartagineses y etruscos.