Jorge Jacobs  quien tuvo gran identificación con el Dr. Manuel F. Ayau de quien aprendió mucho sobre las ideas de la libertad; recuerda que él siempre tenía una anécdota que contar de la vida, de la empresarialidad, de sus conversaciones con Friedrich A. Hayek, Ludwig von Mises, Milton Friedman o de otros defensores de la libertad, así como de su participación en la vida política y económica de Guatemala, entre otros.

Comenta que el Dr. Ayau tenía intereses variados y que su mentalidad de ingeniero siempre lo hacía estar pensando en nuevas y mejores formas de hacer las cosas; poseía grandes conocimientos pero siempre estaba aprendiendo; era un gran didacta.  Su gran capacidad lo llevó a ser una de las personas más influyentes de la segunda mitad del siglo XX, a través de su columna, una de las más leídas, en la que escribió hasta sus últimos días.

También, habla de su humildad, sentido del humor, amor a la vida y de su objetivo principal que era mejorar la calidad de vida de los guatemaltecos.  Para finalizar, manifiesta que la obra de Muso ha quedado en muchas y buenas manos que harán perdurar su legado.