Rocío Guijarro, profesional venezolana, manifiesta que Muso fue inspiración por su humorismo y forma única de transmitir las ideas de la libertad en las que creía.  También, comenta sobre el valor de su obra Un juego que no suma cero porque trata de las reglas del intercambio y los derechos de propiedad que están tan amenazados actualmente en Venezuela.  Expresa que la Universidad Francisco Marroquín es un legado y ejemplo para que en Latinoamérica se funden también otras universidades donde se formen liberales que creen en la economía de mercado como la mejor forma de prosperar y de reducir la pobreza.  Finalmente, expresa su agradecimiento a Muso y compromiso de continuar divulgando sus ideas a las nuevas generaciones.