Formación en supervisión clínica | Departamento de Psicología

Sandra Luna, psicóloga clínica y forense, presenta a Gilda Rodríguez, Julián Sinibaldi y Noel Quintero, participantes del conversatorio sobre la formación en supervisión clínica, organizado por el Departamento de Psicología.
La moderadora, Gilda Rodríguez, inicia su discurso preguntando a los participantes por la perspectiva sobre el proceso de la supervisión clínica en la formación de psicólogos al estudiar la carrera de Psicología. Tanto Quintero como Sinibaldi destacan la importancia de la supervisión clínica en la formación y desarrollo de profesionales en psicología y salud mental. Quintero enfatiza que la supervisión va más allá de la enseñanza académica, centrándose en el desarrollo de actitudes, valores y habilidades. Por otra parte, Sinibaldi menciona que la supervisión cumple tres funciones clave: formativa, normativa y reparadora. Ambos concluyen que la supervisión es esencial para transformar a estudiantes en profesionales competentes comprometidos con el bienestar de sus clientes y el servicio de excelencia en psicología y salud mental.

Es maravilloso, como en contextos diferentes compartimos inquietudes comunes, preocupaciones comunes y también experiencia de satisfacción común”. — Noel Quintero

La siguiente pregunta de Gilda Rodríguez va dirigida a Sinibaldi quién es coordinador de la clínica en la Universidad Francisco Marroquín. Ella le pregunta sobre cómo, en términos de beneficio a los estudiantes, se da el proceso de esa alianza supervisora. La respuesta del doctor. es que la clínica universitaria tiene dos funciones importantes: formar a estudiantes para convertirse en terapeutas competentes y proporcionar atención a clientes. Menciona que en el caso de la Clínica Víctor Frankl, los estudiantes de quinto año implementan diagnósticos y terapias bajo supervisión cercana en instalaciones avanzadas. La supervisión incluye observación en vivo y retroalimentación para mejorar la calidad de atención. También menciona que la clínica busca alinearse con las normas de entrenamiento en psicología y competencias, aunque adaptándose a las realidades latinoamericanas.
La moderadora dirige la misma pregunta al Dr. Quintero, quién por su trayectoria de más de 10 años como director de adiestramiento crítico en la Universidad Albizu, posee las características que el Dr. Sinibaldi mencionó en el proceso de formación de estudiantes. El Dr. Quintero responde que la clínica universitaria tiene dos funciones esenciales: formar a estudiantes y proporcionar atención a clientes necesitados. La supervisión desempeña un papel fundamental al permitirnos analizar y mejorar los servicios. La ética y el bienestar del cliente son prioritarios, incluso en situaciones de conflicto con la formación de estudiantes. Adaptar modelos psicológicos a la cultura local es un desafío importante en Puerto Rico y América Latina, que requiere más investigación y desarrollo de nuevos enfoques para el beneficio de los clientes.

Nuestros clientes son nuestros primeros maestros, nos enseñan del dolor, del sufrimiento, de sus preocupaciones y nos ponen casi siempre en esa perspectiva de ser humano, de ser sensible”. — Noel Quintero

El conversatorio prosigue con la siguiente pregunta, ¿cuáles son los elementos esenciales que un profesional de la psicología necesita para desarrollarse y eventualmente convertirse en supervisor de la práctica? Tanto el Dr. Sinibaldi como el Dr. Quintero destacan los elementos esenciales que un profesional de la psicología necesita para convertirse en un supervisor de la práctica. Ambos enfatizan la importancia de la disposición para el aprendizaje continuo, la apertura, el respeto y el crecimiento personal. También recalcan la importancia de la formación continua, la adaptación a los cambios y la promoción de la diversidad y la equidad en la supervisión clínica y la práctica de la psicología.
La siguiente pregunta es ¿Cómo consideran que la evolución de la supervisión clínica, con enfoque en la innovación tecnológica y las observaciones en vivo, contribuirá al avance y desarrollo de la prestación de servicios en el futuro? El Dr. Sinibaldi responde que la supervisión clínica está en constante evolución y busca desempeñar diversos roles, desde preparar a los estudiantes para convertirse en profesionales competentes hasta ayudar a los profesionales a mantenerse al margen de los problemas de los pacientes. Los supervisores enfrentan el desafío de brindar retroalimentación constructiva y, a veces, tomar medidas para detener a un estudiante si es necesario. Y en cuanto en relación a la tecnología menciona que la supervisión en vivo y el uso de videos son herramientas valiosas para lograr esto, ya que permiten una retroalimentación más efectiva y la capacidad de mostrar a los estudiantes cómo podrían haber manejado las situaciones de manera diferente. La tecnología, como los videos, no resta humanidad a la supervisión, sino que la enriquece y permite adaptarse a las necesidades individuales de los estudiantes.

El psicólogo tiene que ser realmente un agente de cambio que promueve, abraza y celebra la diversidad humana”. — Noel Quintero

La pregunta para culminar el conversatorio va dirigida al Dr. Sinibaldi la cual es sobre si existe alguna certificación para poder supervisar. Él responde que actualmente, no existe una entidad formadora de supervisores en Guatemala, y tampoco hay regulaciones o requerimientos establecidos por el colegio de psicólogos para la formación de supervisores. Esto se debe a la falta de una entidad dedicada a la formación de supervisores en el país, ya que, sin una entidad formadora, el colegio de psicólogos no puede establecer regulaciones en este sentido. El Dr. Quintero también aporta a la pregunta diciendo que en Puerto Rico, se ha destacado la importancia de la certificación en supervisión para colegas supervisores, a pesar de que en el contexto norteamericano ya se requiere un curso de supervisión y experiencia de supervisión. Esta certificación se ha convertido en una experiencia muy enriquecedora para 26 psicólogos y psicólogas, generando un sentido de colegiación y participación más allá de las expectativas. Se vislumbra la importancia de que los supervisores se agrupen, se apoyen y crezcan juntos a través de seminarios y educación continua. Finalmente, se subraya la importancia de la unión y agrupación de supervisores, ya que crea un sentido de pertenencia a la profesión, una identidad compartida y una energía colectiva que impulsa el crecimiento y la excelencia en la supervisión y la psicología en general.