Isabel Cacacho | 27 de octubre de 2021 | Vistas: 95
“Todos los niños tienen el potencial de ser creadores de tecnología, de negocios y de ideas que cambien el mundo”. Esto lo ha demostrado Juan Jose Ascencio al fundar 1Bot: 1 robot per child, una organización con la misión de llevar a Guatemala al top 10 en calidad en educación de ciencia y tecnología. Una meta ambiciosa considerando que, según estadísticas, Guatemala está en las últimas posiciones a nivel mundial en este ámbito, pero es totalmente factible.
Juan José comparte que esta iniciativa nació cuando se le presentaron las estadísticas de la educación en Guatemala durante una conferencia de empresarios por la educación. Al ver los números quedó impactado y lo llevó a preguntarse, ¿por qué Guatemala está tan bajo? En sus investigaciones, encontró una brecha gigante entre la educación privada y la pública en el país, principalmente los colegios trabajan con modelos muy aislados y la creación de currículums es muy cara, algo que afecta enormemente al desarrollo de las escuelas públicas, pues no hay personas lo suficientemente capacitadas para crearlos, ni recursos para llevarlos a cabo a un precio factible.
“Y así nos pusimos una meta. Una meta audaz y espeluznante. Llevar a Guatemala al top 10 en términos de calidad en educación de ciencia y tecnología”. Juan José Ascensio
Para iniciar, decidieron trabajar con un modelo colaborativo junto a la Universidad del Valle, y centralizaron los currículums de varias instituciones, basados en el modelo que proponen para llevarlos a cabo y que pudiesen ser aprobados por el Ministerio de Educación. De esta forma, encontraron la mejor manera de llevar la educación a colegios privados y públicos por igual, usando la fórmula de one for one: cuando una escuela privada adquiere el programa, co-financia a una escuela pública. Así, todos tienen acceso al mismo contenido, con la única diferencia de que el material es usado durante un año por una escuela privada y luego, amortizado se puede llevar a una pública.
“En el primer año, el 80% de nuestra primera generación de alumnos decidió seguir una carrera en la universidad relacionada a ciencia y tecnología”. Juan José Ascensio
El impacto conseguido fue increíble desde los primeros pasos. Ascensio cuenta que varias escuelas tuvieron un incremento de 150% en estudiantes, apoyando a que los niños quisieran volver a estudiar en vez de trabajar. El programa brinda las suficientes herramientas para que puedan aprender jugando, mientras son guiados por un profesor, lo cual es más efectivo a que estudien solos. Hasta ahora, se ha logrado crear productos para escuelas rurales, urbanas e incluso, escuelas especializadas para sordos y ciegos. Esto ha sido posible gracias a la creación de servidores que permiten, a pesar de que no tengan conexión a internet o datos, el acceso a las herramientas en el área que se encuentren.
Los alumnos han llegado a competencias internacionales de robótica y entre los estudios, también abarcan temas como inteligencia artificial, programación, diseño de impresión 3D y emprendimiento, aplicando habilidades del siglo XXI, logrando que los alumnos puedan identificar los problemas que los rodean y así buscar soluciones. Con resultados visibles y palpables, 1Bot está alcanzando su meta poco a poco, apoyando a más de 22 colegios y siendo ahora un gran apoyo internacionalmente, ameritando cada reconocimiento que recibe y cada una de las increíbles historias de sus estudiantes.
Nuestra misión es la enseñanza y difusión de los principios éticos, jurídicos y económicos de una sociedad de personas libres y responsables.
Universidad Francisco Marroquín
