¿Cuál es el enfoque integral para el manejo del dolor en niños con cáncer? | UFM Talks

New Media  | 09 de marzo de 2022  | Vistas: 92

Esta UFM Talk cuenta con la presencia de Thelma Velásquez y Tomás Letona, hematoncólogos pediatras en la UNOP, junto a Silvia Rivas, paliativista pediatra. Los cuales en una rueda de preguntas relatan sus conocimientos y posiciones con respecto al manejo de dolor en niños con cáncer. 

Rivas menciona que el dolor ha tenido diferentes definiciones a lo largo de la historia, y la definición prevalente en la actualidad es la que dio la institución internacional de manejo del dolor en el mundo. Según esta definición, el dolor es la experiencia sensorial y emocional que tiene una persona hacia un estímulo que provoca un daño tisular. El dolor tiene un componente neurológico físico y uno emocional que lo acompaña. 

También Silvia comenta que existen diferentes tipos de dolor, como el dolor somático o visceral, que son provocados por estímulos dolorosos hacia la parte somática del cuerpo en general, y el dolor neuropático, que se asocia principalmente con fricciones de nervios y que es más complejo en términos de fisiopatología. La duración del dolor también influye en su definición, ya que podemos hablar de dolores agudos, que tienen menos de tres meses de aparición, y dolores crónicos, que persisten por más de tres meses. 

En cualquier etapa del recorrido de la enfermedad es importante medir el dolor”. - Silvia Rivas 

Asimismo agrega que el dolor es común en pacientes con cáncer, con porcentajes de incidencia que varían entre el 60% y el 85%. La fase diagnóstica es donde hay más incidencia de dolor, ya que usualmente el paciente no ha comenzado el tratamiento de quimioterapia para el control tumoral, lo que puede provocar dolor. Los pacientes con cáncer pueden experimentar diferentes tipos de dolor, como dolor de huesos generalizado, dolores de cabeza, dolores neuropáticos y mialgias. El tratamiento en sí también puede provocar dolor, como las quemaduras provocadas por la radioterapia. 

Todos los hospitales deben de tener la posibilidad de tener este tipo de tratamientos para poder abordar el tratamiento integral del dolor”. - Silvia Rivas

Por otro lado, Velásquez manifiesta sobre el dolor en niños con cáncer y sus posibles causas. Menciona que el dolor puede ser provocado por la invasión del tejido sano por el tumor y la reducción de las fibras nerviosas. También puede haber dolor irradiado a otras áreas del cuerpo debido a la invasión del tumor en otros tejidos. Comenta que el tratamiento integral del dolor incluye medidas terapéuticas no sólo para el dolor físico, sino también para abordar la parte psicológica, social y espiritual del dolor. 

Hemos visto muchas veces que si a estos pacientes no se les da un recurso psicológico no logran manejar el dolor”. - Thelma Velásquez

Thelma comenta que en tumores avanzados, muchos pacientes, especialmente niños, pueden experimentar dolor crónico y debilitante. A menudo, las familias pueden tener miedo de que los medicamentos para el dolor, como la morfina, sean demasiado fuertes y estén relacionados con la muerte. Sin embargo, los médicos pueden administrar los medicamentos para el dolor de manera segura y efectiva, escalando las dosis gradualmente para controlar el dolor sin poner en riesgo la vida del paciente.

La Hematoncóloga junto con la Paliativista hacen mención a cuanto la adicción de la morfina y otros medicamentos para el dolor, los cuales se administran en dosis controladas por los médicos y no son los mismos que los medicamentos que se usan en el abuso de sustancias. Los pacientes que necesitan medicamentos para el dolor no se vuelven adictos a ellos, sino que desarrollan tolerancia, lo que significa que su cuerpo se acostumbra al medicamento con el tiempo y puede requerir dosis más altas para lograr el mismo efecto analgésico.

Finalmente las participantes concluyen que el dolor es una sensación que puede afectar significativamente la calidad de vida de cualquier persona, incluyendo a pacientes pediátricos. Es importante creer al paciente cuando informa tener dolor y tratar de aliviarlo de manera adecuada, ya que el dolor puede ser un gran detrimento para la calidad de vida y el bienestar del paciente. Es necesario estar dispuesto a buscar ayuda si no se puede controlar el dolor de forma efectiva.