New Media | 27 de abril de 2006 | Vistas: 7369
Los juicios de valor se basan en la visión personal de quien los emite. Pueden ser morales, éticos, estéticos, políticos, religiosos, etc., y expresan gustos, preferencias e ideologías.
El Dr. Armando de la Torre comenta que para David Hume los únicos juicios posibles son aquellos que se hacen sobre los hechos, visión que no comparte puesto que a su criterio son más importantes la ética y la estética, que la física, la lógica y la matemática.
Ana Luisa y Antonio Castañeda ofrecen otros aportes, y fundamentan sus opiniones en términos filosóficos donde analizan el origen del concepto de juicio para: Aristóteles, Cicerón, los estoicos, y de los tiempos más modernos, Immanuel Kant y René Descartes. Refieren que un juicio solo puede ser válido cuando se acerca a la plenitud que es la integración entre el espíritu y la razón. Concluyen que la ética se proyecta a los valores y citan al filósofo Benedetto Croce, quien decía que “toda verdad determina unidad de pensamiento y de querer, y que el objetivo es la libertad”.
Nuestra misión es la enseñanza y difusión de los principios éticos, jurídicos y económicos de una sociedad de personas libres y responsables.
Universidad Francisco Marroquín