Biourbanismo de sol y playa

Sophy Ramírez  | 09 de noviembre de 2018  | Vistas: 67

Juan Palop-Casado es un arquitecto que practica la bio-urbanización en su trabajo. En la conferencia, platica sobre la importancia de la implementación del biourbanismo en la arquitectura y cómo él ha desarrollado sus proyectos generando un cambio a beneficio del ecosistema volviendo la infraestructura en estructura, y ejemplifica este concepto con dos proyectos que creó.

Para comenzar, presenta las corrientes que han influenciado la urbanización, donde el biourbanismo plantea el reconocimiento de que habitamos un espacio vivo, por lo que la población al incorporarse no debe hacerlo solo de manera sostenible sino también regenerativa.

Un sistema vivo intercambia información, energía y residuos con su entorno de manera dinámica. Pasar del urbanismo que desatendía esas dinámicas a uno que todo lo que ve, lo ve en clave de intercambio de información, de energía y de materia o residuos es un cambio radical”

Después de esto, presenta la idea de cómo una infraestructura pasa de ser un plano menor y sin importancia, a la estructura, el proyecto en sí, siendo este el principio del biourbanismo, que ayuda a economizar dinero y eliminar el residuo de material. Además señala los contextos que se deberían de considerar para trabajar.

• En qué geografía se operará
• Donde quiere estar disciplinadamente
• En qué entorno teórico se quiere trabajar
• En qué sector se está desarrollando

El primer proyecto que el arquitecto presenta es la construcción de una ciudad deportiva, donde reconstruyó corredores ecológicos, implementó un sistema de porosidad en los muros y un mecanismo de agua y riego. Aquí hace una recomendación sobre la utilización de la teoría de los 25 metros.

El suelo se construye, si creíamos que es una fachada que tiene un detalle complejo, los suelos hay que construirlos, o sea no podemos tener una profesión que renuncia a construir suelos interesantes.”

Luego, Palop-Casado menciona la evolución de la arquitectura, el cambio que ha hecho para él la bio-urbanización en su conocimiento y percepción además de la importancia de trabajar en colaboración.

El segundo proyecto es una reserva de biosfera en la isla Lanzarote, en donde el objetivo fue hacer una reconstrucción de toda la ciudad. Aquí, Juan promueve una nueva forma en la que el arquitecto debería comenzar a conocer sus proyectos, y como esto lo ha ayudado a trabajar mejor.

Tenemos que empezar a entender los territorios las ciudades en escala 1-1, que es la escala donde el sistema nervioso, el sistema cultural empieza a detectar cosas de ese sitio.”

Palop-Casado concluye con la idea de que la conversión de las infraestructuras a estructuras es necesaria para garantizar entornos ecológicos, e incentiva a los futuros arquitectos a no renunciar a un sistema de biourbanismo.